Metralletas de guerrilla sonando repetitivamente, una reunión de rebeldes alrededor de una pista decorada con discoballs y satín setentero. No more glowsticks ni neon kids. Si Hugh Hefner hubiera nacido negro, definitivamente tendría la locación perfecta para componer este compilado rodeado de lindas afro playmates y disco cyborgs.
Es la vulgaridad de unos neo yorkinos visionarios con sonidos atascantes de pornografía dance, cadenas de oro pagadas con dinero del hampa y de la comunidad polvoparty. Sintetizadores setenteros acompañados de coristas de discotecas de mala muerte invocando obscuros y profundos riffs.
La fiesta cambia de outfit cuándo los agresivos Sasha Crnobrnja y Alex Gloor aparecen en la escena. Tracks para bailar de principio a fin, infinidad de momentos progresivos y sonrisas en las caras de los audioescuchas. Una mezcla electro demasiado poderosa como para convertir cualquier dance floor en una gran gang bang.
Es la vulgaridad de unos neo yorkinos visionarios con sonidos atascantes de pornografía dance, cadenas de oro pagadas con dinero del hampa y de la comunidad polvoparty. Sintetizadores setenteros acompañados de coristas de discotecas de mala muerte invocando obscuros y profundos riffs.
La fiesta cambia de outfit cuándo los agresivos Sasha Crnobrnja y Alex Gloor aparecen en la escena. Tracks para bailar de principio a fin, infinidad de momentos progresivos y sonrisas en las caras de los audioescuchas. Una mezcla electro demasiado poderosa como para convertir cualquier dance floor en una gran gang bang.
2 comentarios:
que bueno que se ha pueso tu blog mano
felicidades!!!
Demasiado Exitoooo! Me moria por este album!
Este blog ruuuuuuuules!
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